Eliseo Martín ya sabe con quién se va a jugar su presencia en los próximos Juegos Olímpicos de Pekín. El obstáculista aragonés ya tiene la mínima olímpica, la logró en la final del campeonato del mundo de Osaka del año pasado. Ese día acrecentó aún más su excelente trayectoria al ser séptimo con un gran tiempo de 8:22.91. Ese registro le valió para rebajar la mínima exigida por la IAAF para competir en los Juegos (8:24.60). Pero su presencia en la cita olímpica no está asegurada ya que como ocurre todos los años, en víspera de un gran campeonato, Eliseo Martín se jugará el pase en el campeonato de España.El montisonense se jugará el pase a Pekín con otros tres atletas, puede ser que alguien se sume a lista antes del Nacional, que tienen también la mínima olímpica. Se trata de José Luis Blanco, Antonio Jiménez `Penti´ y Rubén Palomeque. Otro atleta que también tiene la mínima para estar en los Juegos es César Pérez pero no podrá luchar por competir en Pekín ya que sufrió un accidente de moto del que sigue recuperándose.
Tres serán las plazas olímpicas y de momento hay cuatro candidatos. Eliseo es el que mejor en forma está de todos, ya que `Penti´ acaba de salir de una lesión y Blanco, como casi siempre, no está mostrando sus cartas y es muy complicado saber su estado real de forma. Pérez sigue trabajando y a estas alturas del año sus marcas no son nada significativas.
Todo se jugará en el Nacional de Tenerife, que se disputará el 26 de julio. Para el entrendor de Eliseo, Fernando García `Fondi´: "Tener que jugártelo todo a una carta no es justo, pero es lo que hay". El técnico admite que "planificamos la temporada de cara a los Juegos, no al Nacional y en una carrera puede pasar cualquier cosa".
Mientras llega el gran día, Eliseo Martín sigue trabajando duro en las pistas de Monzón. Este sábado competirá en Madrid, luego en Roma y tal vez en Atenas. El objetivo es llegar a tope al campeonato de España para lograr una de las tres plazas que le clasificarían para sus terceros Juegos Olímpicos. Luchar por ellos, vale la pena.
